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El Especial Cerrajería que ha publicado Iberferr en el número impreso de junio, repasa los principales avances de los fabricantes, analiza la marcha del sector e incluye una entrevista con on Urtzi Zubiate, director de Operaciones e Innovación de TESA ASSA ABLOY, y otra con José Luis García de Vicuña, presidente de UCES.
El mercado de cerrajería y seguridad va bien, en general, con unas cifras en los primeros meses del ejercicio muy positivas. Sin embargo, distintas voces prefieren frenar el optimismo y recordar que este mercado, como otros, aún no ha vuelto a los números de prepandemia. Hablan de inestabilidad y debilidades frente a algunas barreras como la inflación o la carestía de productos y ciertos accesorios del campo de la electrónica. Por lo demás, los principales fabricantes siguen cuidando la innovación y renovación. Esto se traduce en incorporaciones de nuevas gamas y servicios a sus catálogos. Manda cada vez más la electrónica, que incluso se incorpora como parte de la mecánica en cierres y sistemas de accesos para edificios, viviendas, hoteles o establecimientos comerciales.
La necesidad de instalar productos de seguridad en las puertas y accesos, se da en todos los niveles del mercado. Esa es la principal clave del sector que, en este sentido, no se muestra sensiblemente distinto de años anteriores. Pero los fabricantes, al menos algunos cuya opinión ha pulsado Iberferr, creen que aún falta un pequeño trecho para recuperar las ventas de 2018 y 2019.
Lejos de quedarse con los brazos cruzados, los fabricantes mantienen una constante inversión en investigación, desarrollo e innovación, para mejorar la calidad de las soluciones para la sociedad o desarrollar otras nuevas. El objetivo a medio plazo es consolidar o, cuando menos, mantener posiciones y liderazgo en el mercado y expandirse en el campo de las tecnologías de seguridad.
Entorno cambiante
La situación es cambiante y el entorno complejo. En consecuencia, se habla de cierta incertidumbre. Es complicado vaticinar por dónde circulará el mercado a medio plazo, pese a que sigue mostrando su habitual resistencia de los últimos años. Todo ello en un entorno internacional complejo lo que aconseja “ser optimistas y a la vez cuidadosos en todo lo que hacemos”, tal y como asegura un fabricante de referencia.
Los cerrajeros son partidarios de una nueva normativa que establezca requisitos de seguridad más altos para los artículos orientados a la protección de los hogares como son los propios de la cerrajería. “Si nos fijamos en los cilindros de seguridad, no es razonable que sea igualmente válido un producto certificado conforme a estándares europeos que un producto fabricado en Asia sin ninguna garantía de seguridad”, explicaba a Iberferr el gerente de una compañía cerrajera.
Por lo demás, el contexto aconseja tender puentes entre los distintos actores del mercado. El entendimiento entre las distintas asociaciones de cerrajeros para defender juntos la profesión parece evidente y es un hecho que trabajan en esta dirección, tal y como pone de manifiesto la información que publicamos en estas páginas.
La Unión de Cerrajeros de Seguridad (UCES) trabaja por ese objetivo desde hace una década. Desde esta entidad, piden, además, caminar junto a los fabricantes, para lograr una mayor fortaleza en las acciones conjuntas, todas ellas tendentes a la búsqueda de una mayor seguridad y garantías para el consumidor.
Preocupa la falta de control en la venta de herramientas profesionales “sensibles”
Turbo Rapid Key Topolino es una de las “ganzúas” más innovadoras de los últimos treinta años. Facilita la labor de miles de profesionales de la cerrajería, pero nada más salir al mercado decenas de videos han invadido las redes sociales más conocidas explicando su funcionamiento y mostrando la facilidad con la que abre un gran número de cerraduras. ¿Qué ocurre si cae en manos de delincuentes, de personas que la podrían usar para reventar los domicilios y desvalijarlos?
La venta de esta herramienta y de otras también “sensibles”, propias de la profesión, al margen de los cauces legales y de control por parte de distribuidores oficiales y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, preocupa a los cerrajeros. Desde la federación UCES ya han reclamado de las autoridades atención sobre este problema, de momento sin respuesta.
El contenido del especial se puede leer completo aquí.
