Amig (Amilibia y de la Iglesia, S.A.) ha presentado en la pasada Expocadena la cerradura invisible Remock Lockey, la “solución definitiva” frente a los robos con fuerza en los domicilios. Se trata de un novedoso producto de seguridad, sin elementos visibles desde el exterior, que incrementa de forma considerable la protección porque “es imposible de forzar desde fuera”.
De esta forma, mientras que la mayoría de los cilindros del mercado, aunque sean clasificados como “de seguridad”, son vulnerables a las aperturas llevadas a cabo mediante ganzúas, llaves mágicas, bumping, taladros o herramientas de extracción, Remock Lockey elude este tipo de problemas.
Comprobada de forma rigurosa para CEM (Compatibilidad Electro-Magnética), la cerradura invisible Remock Lockey cumple con todas las normas de seguridad exigibles, según conformidad CE y FCC.
También puede funcionar de forma manual mediante un botón incorporado. Funciona con un mando a distancia que puede controlar un número ilimitado de cerraduras. Su conexión es por radio frecuencia o bluetooth, con comunicación encriptada por código evolutivo. Se puede borrar o enlanzar el mando según las necesidades particulares de cada usuario. Incluye cuatro mandos y todos los elementos de fijación y regulación necesarios para su instalación. Se comercializa en acabado oro o plata. El modelo Pro, de mayores dimensiones, también incluye el color blanco.