Page 7 - Revista Iberferr 250

OPINIÓN
¿Formarse para delinquir? Lo que nos diferencia
El ferretero de mi pueblo hizo un capital vendiendo quincalla. Los lugareños más viejos aun son capaces de precisar que, en rea- lidad, lo que vendía no era quin- calla, sino piedras de chisquero. Creo que da igual. Quincalla era todo lo que tenía valor, incluido el ferrocerio de las famosas piedras de los mecheros.
El ferrocerio es una aleación des- cubierta hacia 1903, que tiene una propiedad llamada piroforici- dad: se inflama al contacto con el aire cuando se pulveriza en partí- culas pequeñas.
En el ferrocerio en el que vivimos hoy, algunas gentes se ganan la vida de una forma igual de “incen-
diaria”. Los falsos cerrajeros están entre ellos. Lo sabemos cuando los auténticos se quejan de que, sin quererlo ni saberlo, forman a personas que, posiblemente, no quieren ser cerrajeros, sino delin- cuentes. A veces las herramien- tas para abrir cerraduras y la formación para manejarlas aca- ban en las peores manos. Es algo parecido a lo que ocurre en las fa- cultades de Ciencias Políticas con ciertos alumnos: estudian para delinquir. Por lo visto, también forma parte de la mal llamada igualdad de oportunidades. Puestos a echar humo, habría que volver a las piedras de chis- quero. Pero como ya nadie fuma...