Ferretería y bricolaje: lo que hacen 38 países para proteger el sector

La apuesta restrictiva de España en la reapertura de los establecimientos de ferretería y bricolaje, choca con lo que se está haciendo en Europa y el mundo. Si repasamos la normativa aprobada en otros países europeos o miembros de la OCDE, observamos que la mayoría ha considerado que los establecimientos de bricolaje, ferretería, construcción y reformas debían seguir operando, con las debidas precauciones. De hecho, allí donde sí se decretaron cierres, los negocios del ramo figuran entre los primeros comercios a los que se les ha permitido una reapertura controlada. Esto es lo que han hecho, o hacen, 38 países (ordenados de forma alfabética):

  • Alemania: las tiendas del ramo figuraron entre las excepciones al cierre generalizado de los comercios. En un primer momento, se implementaron medidas de control y de mitigación de cola.
  • Australia: las principales cadenas de bricolaje están abiertas. Para garantizar una mayor seguridad y aumentar las precauciones, han implementado medidas de control de aforo que pretenden garantizar el distanciamiento personal entre los clientes. También se han restringido los horarios para facilitar las tareas de limpieza y desinfección de los comercios del ramo.
  • Austria: en las primeras cuatro semanas de confinamiento (desde el 16 de marzo al 14 de abril), las tiendas del ramo permanecieron cerradas. Sin embargo, estos negocios figuran entre los primeros que han recibido permiso para reabrir sus puertas una vez ha comenzado el proceso de desconfinamiento.
  • Bélgica: al igual que en Austria, al inicio de la pandemia se obligó a las tiendas del sector a cerrar sus puertas. Sin embargo, desde mediados de abril ya han reabierto sus tiendas, quedando así equiparadas con las de alimentación y farmacia, mientras que en el resto de comercios sigue habiendo restricciones de apertura.
  • Bulgaria: aunque el plan de restricciones incluyó a numerosos establecimientos, las tiendas del ramo han recibido autorización para continuar abiertas, siempre dentro del estricto cumplimiento de determinados requisitos sanitarios e higiénicos.
  • Canadá: las medidas son distintas dependiendo de la provincia estudiada, pero por lo general solo se han decretado medidas de cierre que afecten al sector en Ontario, donde no obstante se ha habilitado la entrega de los productos a las puertas del local.
  • Chile: aunque se han cerrado los centros comerciales y se han indicado restricciones en la apertura de negocios, los establecimientos del sector han permanecido al margen de estas limitaciones y han mantenido su actividad.
  • Corea del Sur: puesto que el grueso de la estrategia de prevención del coronavirus gira en torno a la realización de test masivos, no ha habido un cierre generalizado de negocios y las tiendas del sector han permanecido abiertas y han seguido operando con relativa normalidad, más allá de las debidas medidas de prevención.
  • Croacia: los comercios del sector pueden abrir si así lo desean, de modo que la mayoría de cadenas ha mantenido su actividad, aunque tomando las precauciones que recomienda la pandemia.
  • Dinamarca: tras una primera fase de confinamiento, los negocios del ramo han recibido el permiso para reabrir sus puertas siempre que aseguren las condiciones necesarias para garantizar un distanciamiento social de cuatro metros cuadrados por cliente. El sector ha tomado medidas adicionales para asegurar la higiene de clientes y empleados.
  • Eslovaquia: tras un mes de cierre al público, las autoridades han permitido que los comercios del sector empiecen a reabrir sus puertas bajo determinadas condiciones de higiene y seguridad, comenzando por los locales de menos de 300 metros cuadrados.
  • Eslovenia: ha aplicado medidas similares a las de Eslovaquia. En un primer momento, las tiendas del sector permanecieron cerradas durante un mes. Superada esa fase, el sector figura entre las ramas de actividad que han recibido un permiso especial para iniciar la reapertura.
  • Estados Unidos: la decisión del cierre de negocios depende de los gobernadores estatales, por lo que la heterogeneidad es considerable. En términos generales, las tiendas del sector sí han sido consideradas dentro de los servicios esenciales, por lo que se han mantenido abiertas en muchos Estados, aunque desarrollando distintos protocolos de apertura que garantizan el distanciamiento social y la higiene de los comercios.
  • Estonia: los comercios pueden seguir operando, siempre que cumplan ciertas condiciones como, por ejemplo, disponer de geles desinfectantes en la entrada y la salida o garantizar dos metros de distancia entre cada cliente. En la primera fase del confinamiento se ordenó el cierre de centros comerciales, afectando a los establecimientos sectoriales que tienen su sede en dichos espacios, aunque este veto se suspende inmediatamente con el paso al desconfinamiento.
  • Finlandia: las autoridades no han adoptado restricciones que afecten al funcionamiento del sector, más allá de reclamar las mismas medidas básicas de distanciamiento, seguridad e higiene que se han solicitado a todos los negocios.
  • Francia: el sector ha sido una de las excepciones al cierre generalizado de las tiendas y negocios. En un primer momento, algunas empresas han optado por cerrar sus puertas de forma voluntaria para garantizar la seguridad de sus empleados. Superada esa primera fase, el sector ha empezado a dar pasos hacia la reapertura generalizada.
  • Grecia: las drásticas y rápidas medidas de confinamiento tomadas por el país heleno afectaron a las tiendas del sector, pero está previsto que en las primeras semanas de mayo se permita su reapertura, en el marco de las primeras medidas de desconfinamiento y normalización.
  • Hungría: el sector ha cerrado sus puertas entre marzo y abril, pero podrá operar con normalidad a partir de mayo, una vez arranque la fase de reapertura. Se exigirá, eso sí, el uso generalizado de mascarillas.
  • Irlanda: las tiendas del ramo han permanecido abiertas, pero se han visto obligadas a operar con ciertas limitaciones (priorizando la venta de productos de primera necesidad, generalizando el servicio de entregas a domicilio, etc.).
  • Islandia: los establecimientos del sector han seguido operando en todo momento, aunque se les ha pedido que garanticen el cumplimiento de las medidas esenciales de higiene y distanciamiento social.
  • Israel: el sector no ha tenido que cerrar sus locales, al figurar entre los servicios esenciales que han podido funcionar con normalidad durante el confinamiento, aunque se ha pedido una limitación de aforo para favorecer el distanciamiento social.
  • Italia: las autoridades han apostado por permitir que sigan abiertas las tiendas del sector. El sector ha impulsado medidas varias para garantizar la seguridad de clientes y trabajadores, como el uso de mascarillas y guantes, además de el control de aforo.
  • Japón: en el país nipón no se han tomado medidas estrictas que impliquen el cierre de negocios. El gobierno simplemente exigirá el cierre de locales comerciales si éstos incumplen las medidas de higiene y distanciamiento social.
  • Letonia: las medidas de cierre de actividades no han afectado a los negocios del ramo, que han seguido abiertos desde que estalló la pandemia.
  • Lituania: en la fase de cuarentena se exigió el cierre de los comercios del sector. Sin embargo, estos negocios fueron incluidos en la primera fase de reapertura de la economía, que entró en vigor a mediados de abril.
  • Luxemburgo: el cierre generalizado de negocios afectó a los locales del sector. No obstante, las autoridades permitieron la reapertura de las tiendas del ramo desde mediados de abril.
  • México: aunque se han aprobado medidas orientadas a cerrar o limitar la actividad de determinados negocios, las tiendas del sector han quedado al margen de dichas restricciones y han seguido funcionando con relativa normalidad.
  • Noruega: las medidas de aislamiento social no han afectado a las empresas del sector, de modo que estos negocios han mantenido su operativa.
  • Nueva Zelanda: las tiendas dedicadas a esta rama de actividad se han mantenido abiertas, aunque con la condición de que atiendan solamente a otros negocios o a clientes con necesidades esenciales.
  • Países Bajos: los comercios del ramo se han incluido entre los sectores que han recibido permiso para seguir funcionando con normalidad durante la fase de confinamiento, de modo que el parón no ha afectado a este tipo de negocios.
  • Polonia: las restricciones en Polonia no han afectado a los comercios del sector situados fuera de los centros comerciales, a los que se permitió seguir funcionando a cambio de limitar el contacto entre clientes y trabajadores. Sin embargo, los negocios con sede en centros comerciales podrán reabrir en las próximas semanas.
  • Portugal: las autoridades lusas han considerado que las tiendas del sector cumplen un servicio esencial, de modo que han seguido funcionando en todo momento. Eso sí, se han implementado medidas para reducir al máximo posible el contacto dentro de los locales (por ejemplo, asegurando que solo haya cuatro clientes por cada 100 metros cuadrados de superficie comercial).
  • Reino Unido: las tiendas del sector han sido consideradas como servicios esenciales. Algunas cadenas han optado por cerrar sus puertas en las primeras semanas de la crisis sanitaria, aunque a finales de abril se han generalizado las reaperturas.
  • República Checa: los negocios del ramo han recibido permiso para seguir abiertos desde el primer momento. Hasta principios de abril, la autorización estuvo limitada a la venta de productos y servicios a profesionales o sectores esenciales. Desde entonces, se recuperó el resto de la actividad.
  • Suecia: puesto que las autoridades del país escandinavo han apelado a la responsabilidad individual de los ciudadanos y han rehusado introducir medidas forzosas de cierre de negocios, los negocios dedicados a esta línea de actividad han permanecido abiertos, al igual que la gran mayoría de comercios.
  • Suiza: aunque en un primer momento se incluyó a los negocios del sector entre los comercios que debían permanecer cerrados, a finales de abril se les incluyó entre los primeros que pudieron recuperar la normalidad.
  • Turquía: los fines de semana hay un toque de queda que impide abrir al grueso de comercios. Sin embargo, de lunes a viernes se puede operar con normalidad. Las grandes cadenas del sector cerraron voluntariamente durante el primer mes de medidas de aislamiento, pero recuperaron posteriormente la actividad.
  • Ucrania: las tiendas figuran entre los sectores considerados esenciales, por lo que han permanecido abiertas en todo momento.

FUENTE: FORO REGULACIÓN INTELIGENTE, un think tank (laboratorio de ideas e instituto de investigación), que promueve un debate constructivo sobre la importancia de simplificar y mejorar el entorno normativo de empresas y emprendedores.

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