-ENTREVISTA-
Rubén Rodríguez Martínez, director de la cadena de 
ferreterías El Sabio.
Un año después de su puesta en marcha, la cadena de ferreterías El Sabio ya tiene presencia en diez Comunidades y persigue el objetivo de terminar 2022 con medio centenar de establecimientos asociados. Tras este crecimiento está la mano de Rubén Rodríguez, un joven con amplia experiencia en empresas como Würth, Almesa, Bricomart, Velux, Dielectro, Saltoki y, ahora, Grupo Internaco. Licenciado en Empresariales, el director de El Sabio asegura que el suyo es un modelo de gestión que les diferencia y que es capaz de convertir la experiencia de compra en algo “increíble”. Generar confianza, dar visibilidad y exclusividad al ferretero sin conflictos con otros “sabios”, hacerle partícipe de las decisiones estratégicas comunes y facilitarle formación y herramientas de marketing, son algunas de las claves de este proyecto diferenciador, tal y como explica en esta entrevista exclusiva de Iberferr.
—Un año en el mercado. ¿Cómo y por qué nació El Sabio?
—Cuando adquirimos en 2018 la empresa Benito Areán, nosotros no veníamos de la ferretería, pero sí de un sector muy afín como es el de bosque y jardín. Entonces vimos que existía cierta necesidad en el mercado de hacer visible al ferretero. Hay herramientas que Grupo Internaco, al que pertenecemos, ya utiliza desde los años sesenta y que fuimos completando con otras que utilizan los suecos y los japoneses para hacer visible un marca y trascender el mercado. Pensamos en que era bueno ayudar al ferretero a modernizar el sector y que tuviese estas herramientas. Así fue como nació El Sabio, de la fusión de dos empresas del grupo: Benito Areán y Motogarden.
—Es cierto que los ferreteros son sabios a todas luces, pero, ¿por qué ha elegido ese nombre?
—Porque es un nombre que transmite confianza y porque, es cierto, el ferretero de toda la vida es un sabio. Queríamos que los ferreteros que están en el proyecto se sintiesen identificados con ese nombre. Además, consideramos que no tiene ninguna connotación negativa. El sabio es un prescriptor, que transmite confianza y conocimiento. Define muy bien lo que es un ferretero de toda la vida. Por otro lado, tratamos de diferenciarnos de otros nombres que hay en el sector. Es una forma de hacer marca.
—Ustedes ya han sumado establecimientos en diez Comunidades en su primer año de vida. ¿Eso cómo se consigue?
—Nuestro trabajo se ha limitado a ayudar al ferretero a potenciar sus habilidades. Es él el que tiene todas las respuestas, como dice uno de nuestros eslóganes. Sabe lo que necesita el consumidor y tiene experiencia en asesorarle y en aportar soluciones a sus necesidades. Los ferreteros saben hacer esto muy bien, desde hace mucho tiempo. Nosotros sólo pretendemos ayudarles en el resto de asuntos que están alrededor de ese trabajo. Y que ellos solo tengan que preocuparse por lo importante y que la experiencia de compra sea increíble. El resto, el modelo de gestión de la ferretería se lo aportamos nosotros. Por eso hemos conseguido este crecimiento bastante rápido.
—El Sabio compró Distribuidora Ferreglobal en septiembre del año pasado. ¿Con qué objetivos?
—En todas las áreas de negocio en las que trabajamos, intentamos aportar las mejores soluciones. Y teníamos un hueco importante en la herramienta manual. Surgió la posibilidad de comprar Ferreglobal y su marca Truper, que es una referencia mundial, con un altísimo estándar de calidad. Eso está en el ADN de Grupo Internaco puesto que tratamos que todas las marcas que tenemos sean de la más alta calidad para que los ferreteros y nuestros clientes puedan aportar, a su vez, la mejores soluciones. Como teníamos ese hueco, buscamos opciones con ellos y llegamos a un acuerdo para integrarlos en nuestro grupo y tener esta marca en exclusiva. Creo que nos ayuda a que los ferreteros de El Sabio aporten soluciones muy competitivas en le campo de las herramientas manuales.
“El comercio de proximidad se ha beneficiado por la Covid. Y eso no es una tendencia de corto plazo. nos hemos dado cuenta de que podemos cubrir nuestras necesidades sin desplazarnos tanto como lo hacíamos antes. El confinamiento ha reducido nuestro ámbito de compra Y creo que eso es bueno”.
—Los objetivos de 2022. ¿Cuántas ferreterías quieren sumar este año?
—Nuestro objetivo este año es sumar 34 ferreterías más y acabar 2022 con cincuenta puntos de venta con el perfilamiento corporativo de El Sabio. No es un objetivo sencillo. Tampoco era fácil arrancar de cero a 16 en 2021. Considero casi más sencillo hacer 34 este año que 16 el primer año. Tenemos todo muy avanzado y ya estamos trabajando en cerrar los del tercer y cuarto trimestre.
—El sector, perspectivas y futuro. ¿Cómo ve el mercado de ferretería a medio plazo?
—Veníamos de una situación pre crisis, anterior a la Covid, y ahora nos ha venido la pandemia para removerlo todo un poco más. Lo cierto es que toda crisis viene acompañada de oportunidades. Creo que la Covid ha supuesto claramente una oportunidad para nuestro sector, máxime en el negocio de proximidad y local que es, precisamente, donde va dirigido el proyecto de El Sabio. El comercio de proximidad se ha visto beneficiado por la Covid. Y eso no va a ser una tendencia de corto plazo. Todos nos hemos dado cuenta de que tenemos la capacidad de cubrir nuestras necesidades al lado de casa, sin tener que desplazarnos tanto como lo hacíamos antes. El confinamiento ha hecho que reduzcamos nuestro ámbito de compra. Y creo que eso es bueno. Hay que ayudar a hacer una economía más sostenible de la que teníamos. La concentración del mercado es evidente y va a continuar. Creo que el comercio de proximidad y local tiene ahora una oportunidad con el proyecto de El Sabio.
—En el ámbito personal, ¿qué es lo que más le gusta de la ferretería y el bricolaje?
—En mi experiencia laboral he tenido dos tipos de trabajo. Aquel que va más dirigido al sector profesional y el que va más dirigido al usuario final. Son dos negocios distintos, los dos muy importantes, ambos con inversiones millonarias, pero con una diferencia fundamental: que el particular cada vez se convierte más en un prescriptor. Antes, la prescripción se hacía al sector profesional, instaladores, constructores… para que lo aplicaran al cliente final. Ahora el cliente final decide cada vez más lo que quiere, sabe más, mira más, y el asesoramiento que necesita es más directo, con menos intermediarios. Por eso digo que el sector de la ferretería y el bricolaje tiene una gran oportunidad. Porque va directamente al particular y es capaz de influir sobre su decisión con esta prescripción y asesoramiento. Creo que es el momento para hacer eso bien y ofrecer productos de mayor calidad que solucionen las necesidades del consumidor de una forma mucho más eficiente.
Videoentrevista completa en Iberferr Ceros.
