El crecimiento de las ventas telemáticas, esenciales para llegar al consumidor en tiempos de distanciamiento social y restricciones; y “el esfuerzo” realizado por los distribuidores para responder al gran incremento de la demanda que se ha registrado tras el primer confinamiento, figuran como principales causas de la recuperación del mercado de productos de ferretería y bricolaje en los últimos meses.
El sector, que ha cerrado 2020 con un descenso del 1,06%, encara un nuevo ejercicio con “esperanzas y respuestas” ante un entorno cambiante por la pandemia, que modifica cada día los hábitos de los consumidores.
Así lo cree la asociación de empresas Aecoc en un primer balance de este 2021, en el que anota que, tras acumular pérdidas de hasta el 25,5% durante los meses de cierre de los establecimientos, el sector se ha recuperado con fuerza en el tercer y cuarto trimestre, con crecimientos del 18,7% y del 12,54%.
“El sector ha logrado cerrar el año más difícil que recordamos con un volumen de negocio muy similar al de 2019, lo que pone de manifiesto la capacidad de resistencia y de adaptación de todos los operadores, que han sabido responder a un contexto en constante cambio”, asegura el responsable del área de DIY de Aecoc, Alejandro Lozano.
Lozano recuerda que el sector ya experimentó una fuerte recupeación en el segundo semestre de 2020 y que en los últimos meses la cifra de negocio creció un 18,73%, mientras que el comparativo del último trimestre fue de un 12,54%.
El portavoz de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores advierte, no obstante, que el sector “deberá estar preparado para vivir un año marcado nuevamente por la incertidumbre, tanto en los que se refiere a regulación como en términos de demanda”.
