¿Qué ferretería nos encontraremos tras el verano? ¿Qué ha cambiado en la percepción del consumidor sobre estos establecimientos? ¿Cuánto de lo establecido en la últimas semanas en internet y en los establecimientos físicos se mantendrá?
La ferretería recuperó entre junio y julio un 73% de lo perdido durante el confinamiento tras caer un 22% en marzo y un 9,26% en el conjunto del primer trimestre. Llegábamos al verano con cifras de récord que, sin embargo, partían desde muy abajo. La reapertura de los establecimientos ferreteros y de bricolaje en la segunda semana de mayo, tras dos meses largos de cierre forzoso, logró amortiguar el impacto del virus, pero agravó los problemas del sector.
Ahora el panorama es distinto. Dos de cada diez fabricantes españoles de productos de ferretería y bricolaje (un 22%) reconocen haber crecido hasta el 10% durante el primer semestre, pese a la hibernación obligada de las ferreterías en los meses duros de la pandemia. Además, otro 2% declara un aumento del 20% en sus ventas durante el mismo periodo. Crecer a dos dígitos es siempre una buena señal para creer en el futuro.
Las empresas buscan una respuesta de esperanza en las cifras. Algunas como AkzoNobel (pinturas y decoración) ya han publicado los resultados del segundo cuatrimestre. Los ingresos de la multinacional holandesa, con planta en la zona franca de Barcelona, se han visto reducidos en un 19%, con un efecto de precio/mix positivo del 2%, pero con una afectación negativa del volumen del 18%. Así las cosas, el resultado final del total de operaciones mejoró hasta los 129 millones de euros. Pero la mala noticia es que esa cifra supone casi la mitad de lo cosechado en el mismo periodo de 2019 (231 millones de euros).
EL ‘ONLINE’ QUE SALVA LAS VENTAS
Hasta antes de la pandemia, los establecimientos físicos dominaban el mercado de ferretería sobre el e-commerce. Según un estudio de AECOC Shopperview, más del 90% de los compradores (nueve de cada diez) habían acudido directamente a un establecimiento ferretero para comprar. Parece lejano, pero ocurrió hace nada. ¿Hay que pensar que esto ha cambiado de forma definitiva?
El crecimiento de las ventas en el canal online durante el primer semestre de 2020 se mueve entre el 10% y el 50%, según los casos. En general, dos de cada diez proveedores declaran que han crecido en torno a un 300% en este campo. Un 16% ha registrado un crecimiento del 10%. Un 12% registra una subida del 100% y un 4% alrededor del 300%. Son datos de una encuesta reciente.
Las 1.400 ferreterías asociadas a Cadena 88 lograron cubrir la mitad de sus ventas a través de la venta por internet, lo que se ha traducido en un crecimiento del 979% en esta modalidad comercial. La distribuidora asegura que, pese al virus, este año ya ha superado todas las previsiones de crecimiento, con un incremento en el importe de los pedidos de un 128% respecto al mismo periodo de 2019.
Como se sabe, las ferreterías de Cadena 88 pueden ofrecer a sus clientes la compra de productos que ni siquiera tienen en sus establecimientos, pero que sí figuran en los almacenes de la distribuidora. La operación se realiza como en cualquier otro marketplace (como amazon o AliExpress), pero la compra la contabiliza la ferretería aunque se efectúe directamente en el almacén central de la suministradora
LA CONSTRUCCIÓN VUELVE A SER EL MOTOR
La construcción, uno de los grandes motores de la ferretería, ha crecido durante estos meses, favorecida por una libertad de la que no han gozado otros sectores. Además, los españoles hacen más reformas que sus vecinos europeos, según revela la patronal del ramo, Andimac, en un estudio que pone de manifiesto que el porcentaje de interesados en mejorar sus viviendas en España alcanza a seis de cada diez hogares (el 61%), porcentaje que supera en 10 puntos la media comunitaria.
La patronal sostiene que, durante la pandemia, los españoles han podido percatarse de las deficiencias en sus viviendas y plantearse futuras mejoras, al margen de que posiblemente su uso intensivo haya deteriorado el estado de determinadas estancias.
LosamHune, empresa de alquiler de maquinaria, ha adelantado que el 61% de los hogares españoles ha realizado obras de reforma este verano. Si es así, los resultados se verán muy pronto en las cuentas de la ferretería.
Según las previsiones realizadas por Euroconstruct en junio, este centro de estudios prevé una caída en la producción del sector de la construcción del 15% en España para 2020. La crisis de este sector no solo afecta a las constructoras como principales actores de este mercado, sino a todo el ecosistema adyacente compuesto entre otros por
los fabricantes de materiales de construcción.
Un informe elaborado por CEPCO (Confederación Española de Asociaciones de Fabricantes de Productos de Construcción), vaticina la destrucción de una parte de las 33.560 empresas del sector de fabricantes de materiales de construcción. La entidad calcula que al menos medio millar de fabricantes de este ramo ya han tenido que echar el cierre hasta la fecha.
Otro dato: el consumo de cemento en España, uno de los indicadores más fiables de cómo marcha el sector, acumula una caída en el primer semestre del año del 16,5%. Y las exportaciones mantenen una tendencia poco alentadora.
EL VIRUS TIENE LOS MESES CONTADOS
Con todos estos datos, ¿hay margen para la esperanza y el optimismo?
La pandemia lo dirá. No perdamos de vista que el virus tiene los meses contados. Mientras, y al margen del calibre de una segunda ola, el mercado parece dispuesto a seguir haciendo los deberes, siempre y cuando no se lo impida otro cierre de actividad.
La ferretería remontó antes que otros sectores cada vez que se vio envuelta en una crisis. Casi nadie duda de que lo volverá a hacer ahora, pese a que fabricantes, distribuidores y ferreteros prefieren mostrarse cautos sobre la intensidad y rapidez de la recuperación.
Con precaución, con medidas de protección y con todas la cautelas, la ferretería volverá en el corto plazo a sus antiguas posiciones de mercado. ¿Hay otra alternativa?