Una mujer con movilidad reducida de Ciudad Real recibió, al parecer por error, una factura de más de 4.000 euros de una empresa de cerrajería ’24 horas’, acompañada de otras facturas de 400 euros.
Es uno de los casos de prácticas abusivas en el sector, que la Unión Cerrajeros de Seguridad (UCES) ha constatado estos días, junto con otros casos localizados en Murcia y Ciudad Real, en los que los cerrajeros han cobrado altas cantidades por diversos servicios que no deberían “costar tanto dinero al cliente”, según advierte Manuel Sánchez, presidente de UCES.
La federación de cerrajeros cita el ejemplo anterior y un servicio de apertura y cambio de cerradura en Puertollano (Ciudad Real) de casi 600 euros; además de otros dos casos similares, que se suman a los de la mujer que recibió la factura de 4.000 euros.
La UCES también denuncia que en Murcia hay judicializados 60 casos de presuntas estafas realizados por una misma empresa de cerrajería que en Nochevieja “estafó” más de 1.000 euros a un matrimonio de Cartagena por realizar la apertura de una puerta.
“El precio de la factura de Puertollano o de Cartagena hace unos meses, parecen un claro abuso. Un cerrajero acreditado por la Unión Cerrajeros de Seguridad nunca cobraría esas cantidades. Desgraciadamente, en España, es más caro el cerrajero “abrepuertas”, como denominamos en el sector a muchas empresas como las denunciadas en Murcia, que el cerrajeros de seguridad acreditado por la Unión, que cumple todos los requisitos de formación, adhesión a Consumo y certificado de Penales”, asegura Manuel Sánchez.
¿CÓMO EVITAR ESTOS ABUSOS?
“Los primeros molestos con la proliferación de empresas del tipo de la factura de Ciudad Real o Murcia son los propios cerrajeros, contaminados por esa mala fama y que, además, ven en ellos una competencia feroz”, afirma Manuel Sánchez.
La UCES calcula que entre el 50% y el 60% de los trabajos que se encargan a cerrajeros en España los terminan efectuando estas llamadas empresas “abrepuertas”.
Las razones por las que tienen más clientela tienen que ver con la publicidad de unos y otros. El tipo de cliente que necesita un cerrajero de urgencia, ansioso por recuperar su casa, suele dejarse llevar por los instintos y por lo primero que tiene a mano. Y ahí entran las pegatinas que a menudo uno encuentra en puertas de garaje, papeleras y demás espacios públicos, donde generalmente aparece un teléfono móvil que en muchas ocasiones, como tenemos constancia, son empresas “alegales”.
NO HAY TARIFAS OFICIALES
El presidente de UCES advierte de que “no hay una tarifa oficial. Está prohibido por normativa europea. El precio de Ciudad Real o Cartagena como ocurre con otros servicios o productos, no será igual que el de Madrid, como pasa con el precio de un café en la Castellana o en un pueblo de La Mancha”.
Una tarifa normal de apertura sencilla puede variar de 60 a 100 euros más desplazamientos. Si es en horario nocturnos o festivos puede ascender solo un 20% más y si es un momento como Navidad o Año Nuevo puede crecer un 40%, pero, “desde luego las cantidades que estamos viendo estos días nunca está justificada”, concluye Sánchez, quien también quiere destacar que los precios pueden depender del tipo de cerradura, puerta, bombín, de la calidad y la seguridad de la cerradura o de la puerta.