“Identificamos el hidrógeno como una opción en la combinación energética del futuro”. Lo dice Stefan Prokosch, vicepresidente senior de gestión de marca de Linde Material Handling, el referente de carretillas elevadoras, que ya ha invertido unos 2,8 millones de euros en la planificación y construcción de la infraestructura de hidrógeno.
Linde ha puesto en marcha el proyecto faro de hidrógeno, una iniciativa sin precedentes en el sector, que, utilizando su propia infraestructura, ya produce hidrógeno verde para alimentar 21 carretillas elevadoras de pila de combustible de su flota interna. Estas carretillas contrapesadas eléctricas, con sistemas híbridos de pila de combustible, que comprenden 12 Linde E50 con una capacidad de carga de cinco toneladas y nueve Linde E35 con una capacidad de carga de 3,5 toneladas, sustituyen a los modelos de combustión interna (IC) utilizados anteriormente.
La inversión está financiada por el Ministerio Federal Alemán de Asuntos Digitales y Transporte (BMDV), coordinada por NOW GmbH y ejecutada por Project Management Jülich (PtJ). El objetivo es adquirir experiencia y acumular conocimientos para poder ofrecer a los clientes asesoramiento y apoyo completos sobre el uso del hidrógeno en los procesos de flujo de materiales.
Además de la posible neutralidad climática, el rápido repostaje de las carretillas industriales con hidrógeno durante las operaciones intensivas de varios turnos supone una gran ventaja. “Un tiempo de repostaje de tres minutos corresponde a una potencia de carga comparable de unos 480 kW”, explica Stefan Prokosch.
