Cinco personas, tres hombres y dos mujeres, forman el equipo de la nueva ferretería El Sabio Comercial Grande, ubicada en el polígono industrial de Camponaraya, a siete kilómetros de Ponferrada, una urbe de 70.000 habitantes, capital de El Bierzo. Los cinco cumplen a rajatabla las características que distinguen a la marca: proximidad con el cliente, atención personalizada y un profundo conocimiento del producto.
Su propietario, Francisco Javier Fernández Martínez; su mujer, Joyce; Fernando, Jessica y Pedro, son los rostros del establecimiento, especializado en maquinaria agrícola y para riego. “Yo llevo más de 20 años en el sector, igual que otras personas del equipo”, subraya Francisco Javier, que heredó de sus padres el amor por el oficio. Ahora está convencido de que este proyecto hecho realidad de la cadena El Sabio estaba hecho para él.
Esta pasión por el negocio familiar, que Francisco Javier comenzó a aprender desde que cumplió los ocho años, tiene mucho que ver con su decisión de apostar por El Sabio: “Me da mucha confianza y seguridad y, además, no pierdo ni mercado ni mi identidad, sino todo lo contrario, El Sabio me diferencia”, asegura el gerente.
La incorporación de las nuevas tecnologías también ha sido determinante para sumarse al proyecto. “Hoy en día, vender por internet es esencial y queríamos hacerlo bien”, subraya Francisco Javier al tiempo que destaca que la cadena le ha dado la oportunidad de “abrir más negocio con más producto de continuidad”.
El Sabio Comercial Grande posee unas instalaciones modernas y en sus más de 300 metros cuadrados de superficie expositora los clientes pueden encontrar la más amplia gama de productos de ferretería, para la huerta y el jardín. La ferretería responde a la idea, presente en otros comercios de la cadena, de que diversificar es el camino que hay que seguir para evolucionar y competir en un mercado cada vez más difícil.
